VIRGENCITA ,QUE ME QUEDE COMO ESTOY







Durante siglos, seguramente miles de años, hemos sido ninguneados, vilipendiados, despreciados socialmente, envidiados, arrinconados, castigados sin recreo de cara a la pared, y hemos sentido la pesada losa de la burla en la espalda... mira el cerdo, mira el guarro, el mugriento, el asqueroso, el repugnante, el maloliente, el marrano, el puerco...

Aún así , gracias a nuestras innumerables bondades, podemos afirmar que no estamos tan mal como a nuestros detractores les gustaría. Algunos compañeros han llegado lejos, más lejos de lo que sus cerdas madres hubieran nunca imaginado

y sobre todo, sobre todo, todavía no han inventado nada semejante para nosotros los payoscerdos...