DES COCHONS DANS L'ESPACE.


Desde tiempos inmemorables, el hombre a pretendido abarcar el mar en un dedal, como el niño de san Agustín, ya sea queriendo volar, controlar la naturaleza o salir victorioso del desafío de una cuadrilla de habilidosos trileros.

Y en esa lucha por conseguir esos viejos sueños, muchos héroes desconocidos dejaron sus vidas en el empeño, titanes anónimos olvidados por todos a favor de aquellos que alcanzaron con vida la gloria del triunfo



La maquinaria propagandística de la antigua URSS nos hizo creer que la perrita Laika se lo pasó en grande en aquella ratonera de latón, pero lo cierto es que “Laika” falleció apenas cuatro horas después del lanzamiento, entre un calor insoportable, ataques de ansiedad y ritmo cardiaco frenético


Alineación a la izquierdaModelo del Sputnik 2, la nave espacial de Laika, todo un alarde de ingeniería



Por su parte, los estadounidenses prefirieron recurrir a los monos, debido a su mayor similitud fisiológica con el ser humano, aunque como aquí se demuestra, por aquellos días la nasa también tenía la idea en mente, lo que no sé, es si al cochón pretendían emborracharlo con zarzaparrilla.




Pigs In Space - NASA used pigs to test human survivability in case of a land 'splashdown' by using pigs - they showed no apparent ill effects - truly 'Spam in a Can'. mercpiga.jpg

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NASA Pigs In Space


De hecho, el primer animal en sentir los efectos de la ingravidez a bordo de un cohete fue un macaco, de nombre Alberto I, el cual no sabemos todavía si estaba en estado de embriaguez cuando fue lanzado en junio de 1948 por Estados Unidos en una trayectoria balística (parabólica) que alcanzó 63 km de altitud. Angelico